Un indulto con cabeza

El rescate de Albelda, Cañizares y Angulo es ejemplo de sensatez. Como filosofía de club, un diez para Voro. Si el Valencia quiere partir de cero en pos de la salvación, necesita desterrar del vestuario los rencores, demostrar que el efímero reinado de su ex delegado nada tendrá que ver con la tiranía del ya olvidado Koeman. Otra cuestión distinta es la idoneidad de que los tres jugadores regresen al campo en un momento tan dramático. Sólo Voro puede saber si conviene dar el paso. Albelda declaró que no se siente implicado. Y el ex capitán, sin motivación, es un toro con los cuernos afeitados. Para que el equipo salga a flote, todos deben olvidar. Si Cañizares detiene un penalti, Caneira ha de ser el primero en felicitarle. Y si marca Baraja, el abrazo más fuerte tiene que llegar de Albelda. De lo contrario, mejor dejar las cosas como están.

(Artículo publicado en LAS PROVINCIAS el 24 abril de 2008)